
El Obispo de la Diócesis de Irapuato, Enrique Díaz Díaz, aseguró que la justicia se ha convertido en un trapo sucio, que opera a merced del dinero y del poder.
En su conferencia de prensa dominical, el prelado expresó que se tiene que seguir luchando para que las cosas cambien.
Díaz Díaz añadió que “la justicia, muchas veces está a merced del dinero y del poder y que tenemos que seguir luchando mucho”.
Por ello, recalcó que la justicia debe ser pareja para todos, principalmente para los que menos posibilidades tienen, aunque reconoció que hay un camino largo.
“Que muchas veces se queda, en días pasados visitaba la cárcel y los que están ahí, todo mundo se dice inocente, muchos son inocentes, pero están ahí por falta de recursos o por un delito que hayan cometido”, añadió.
El prelado mencionó que los delitos no deben quedar olvidados, pues mencionó que algunos, se resuelven de un modo muy pronto.