Agustín robles Montenegro presidente del módulo de riego 011, indicó que a pocas semanas de terminar el 2023, la crisis del campo no presentó ninguna mejora y por el contrario prevén que el 2024 sea aún más preocupante.
Indicó que la falta de lluvias puntuales, afectó la capacidad de abasto de las presas durante el inicio de la temporada de lluvias, pues las pocas que se presentaron fueron esporádicas e insuficientes para aumentar el nivel de estos vasos captadores, además de que la asignación de este líquido por parte de la CONAGUA, fue la mínima, equivalente a 460 millones de metros cúbicos, lo cuál no alcanzó para establecer un cultivo de otoño-invierno, por lo que se decidió postergarlo para primavera-verano del siguiente año.
Agustín Robles, dijo que a más tardar en mayo tendrán que comenzar las siembras, algunos en seco y otros con humedad, dependiendo de las condiciones climatológicas. Mencionó también, qué tanto la siembra, como la cosecha, disminuyeron considerablemente, pasando de 1 millón de toneladas de maíz y 800 mil toneladas de trigo, a sólo, 900 mil toneladas entre ambas semillas.
CAMPESINOS SE SIENTEN DECEPCIONADOS POR FALTA DE APOYO AL CAMPO
Al igual que otros representantes de este sector, Agustín Robles, dijo que existe una fuerte decepción por parte de este gremio hacia el gobierno federal, pues este nivel, desapareció varios de los fondos de ayuda y de impulso a la agricultura, además de que con esta crisis hídrica y por los bajos precios de venta, no recibieron ningún tipo de favor, señalando que únicamente cuentan con el gobierno del estado, del cual también es limitado, pues este, paga a solo $300.00, cada tonelada producida.