La indignación crece entre los habitantes del fraccionamiento Pedregal de San Juan en Salamanca, quienes han alzado la voz contra un vendedor de tarimas que, desde hace más de cuatro años, ha causado múltiples problemas en la calle Turmalina, sin que las autoridades municipales tomen cartas en el asunto.
El hombre señalado por los vecinos, utiliza la vía pública para almacenar y vender tarimas, generando un completo desorden que ha alterado la tranquilidad del vecindario.
Sin embargo, la problemática no se limita a esto, ya que también se dedica a la recolección y compra de desechos industriales, actividad que ha derivado en una situación insalubre para la comunidad.
«Es un foco de contaminación. Aparte del mal olor, hay desechos por todos lados. Esto no es seguro ni para nosotros ni para nuestros hijos», comentó uno de los vecinos que prefirió mantenerse en el anonimato por temor a represalias.
Los clavos sueltos de las tarimas han sido otro dolor de cabeza para los ciudadanos, quienes han reportado daños en sus neumáticos debido a esta situación.
Lo más preocupante para los habitantes de Pedregal de San Juan es la aparente indiferencia de las autoridades. Desde 2020, han presentado múltiples reportes y oficios dirigidos a las áreas de Ordenamiento Territorial y Medio Ambiente, pero hasta ahora, nadie ha procedido.
Los habitantes expresan su frustración ante la falta de respuesta, y aseguran que continuarán alzando la voz hasta ser escuchados.
Los habitantes espera que la administración municipal tome acción inmediata para resolver esta situación que afecta tanto la salud como la seguridad de los habitantes de la zona.
