
El obispo de la Diócesis de Irapuato, Enrique Díaz Díaz, reconoció que hay una falta de interés en las personas por involucrarse en la vida religiosa.
Por ejemplo, dijo que hay algunas congregaciones con déficit de miembros masculinos y femeninos, y otras que tienen una gran presencia.
“Nosotros como seminario vamos teniendo como un poco de déficit, vamos teniendo más sacerdotes y se va superando esta crisis, y ojalá cada día lo sigamos haciendo”, dijo.
El obispo manifestó que, cada día es más difícil encontrar personas entregadas a las actividades religiosas y a las labores de la Iglesia.
“Cada día nos vamos comercializando más, estamos viviendo todo un ambiente, por eso hemos declarado este año, año de las vocaciones, seguiremos a trabajando e invitamos a toda la Iglesia a trabajar en este sentido”, finalizó.