
La preocupación por la situación de seguridad en México sigue en aumento, y se percibe una no fuerte defensa de la soberanía en relación con el crimen organizado. Así lo expresó el obispo de Irapuato, Enrique Díaz Díaz, tras la reciente carta de la Casa Blanca en la que se acusa al gobierno mexicano de estar aliado con el narcotráfico.
«Claro que es preocupante esta declaración de Estados Unidos. Y más preocupante es que así se perciba desde el exterior a las autoridades mexicanas», señaló el prelado.
Díaz Díaz destacó la dificultad para comprobar tales acusaciones, pero indicó que existen elementos que generan sospecha sobre la relación del gobierno con el crimen organizado.
«Es difícil comprobar estas situaciones, pero con frecuencia decimos que si no hay una franca convivencia con ellos, por lo menos hay no una fuerte defensa de la soberanía mexicana en relación con el crimen organizado», afirmó.
El obispo también se refirió a la presencia y el poder del narcotráfico en el país, pues afirmó que siempre quedan en sospecha todas estas actividades.
«Muchos críticos opinan que no puede estar vigente así el crimen organizado si no hay una franca convivencia de ellos o al menos una incapacidad para controlar todo el crimen organizado en todo lo que se va haciendo».
Finalmente, lamentó la realidad de la inseguridad en el país y la expansión del crimen organizad en todo el país.
«Se habla mucho de Sinaloa, pero no es solo. Es en muchos lados donde las drogas y el narco parecen adueñarse de nuestras ciudades», concluyó.