
El Club Irapuato se coronó campeón del torneo tras vencer 2-0 en el marcador global a los Aguacateros de Uruapan, en un duelo de vuelta disputado este sábado en el estadio de Peribán, casa del equipo michoacano.
Con un planteamiento sólido y el respaldo de su afición, que viajó para apoyar, la Trinca Fresera defendió la ventaja conseguida en casa y selló el campeonato con carácter y determinación.
Durante los 90 minutos, el conjunto fresero mantuvo el orden y resistió los intentos del equipo local, que no logró descontar en el global.
Irapuato confirmó su dominio con una actuación efectiva y madura, que le permitió levantar el trofeo como visitante.
Con este resultado, Irapuato vuelve a escribir su nombre en lo más alto, confirmando su papel protagónico en la liga y ratificando su historia como uno de los equipos más emblemáticos del fútbol mexicano.
En el estadio Sergio León Chávez se instaló una pantalla para que la afición pudiera disfrutar del partido y tras el triunfo, los seguidores salieron a festejar.