
Miles de bomberos combatían el sábado un incendio forestal en el norte de California cuyo tamaño aumentó exponencialmente, quemando un área casi del tamaño de Los Ángeles y siendo uno de los varios incendios que afectan el oeste de Estados Unidos y Canadá en condiciones de sequía, calor y fuertes vientos.
El incendio Park es el más grande de california en lo que va del año. Su intensidad y su dramática expansión hizo que las autoridades lo compararan con el monstruoso incendio Camp, que se salió de control en la cercana Paradise en 2018, provocando la muerte de 85 personas y acabando con 11 mil viviendas.
Hasta el momento, más de 130 estructuras han sido destruidas por ese incendio, y miles más están en riesgo, al tiempo que se ordenaron evacuaciones en cuatro condados: Butte, Plumas, Tehama y Shasta.
El fuego mantuvo la noche de este viernes un alcance de mil 243 kilómetros cuadrados y avanzaba rápidamente hacia el norte y el este tras haber iniciado el miércoles cuando, según las autoridades, un hombre empujo un auto en llamas hacia un barranco chico antes de mezclarse tranquilamente con la multitud y huir del lugar.
Fuente e imagen Latinus