Tras varios días de diálogo y manifestaciones, el gobierno federal alcanzó un acuerdo con productores de maíz de Jalisco, Guanajuato y Michoacán, con el propósito de atender las demandas del sector ante la caída en los precios del grano y las condiciones del mercado internacional.
Julio Berdegué Sacristán, titular de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (SADER), informó que el acuerdo se logró en la madrugada, luego de intensas negociaciones con los liderazgos locales.
“Alrededor de las 2:00 de la madrugada logramos un acuerdo con los liderazgos locales con productores de Jalisco, Guanajuato y Michoacán. El tema de fondo es que hemos tenido un aumento enorme en la disponibilidad de maíz en el mundo”.
“Hay un stock récord y México tendrá una muy buena cosecha; también las presas están con muy buen volumen en el norte y será del doble o más del doble que el año pasado”, explicó el funcionario.
Berdegué Sacristán detalló que este panorama global ha provocado una reducción significativa en los precios. “Este volumen de maíz presiona a la baja los precios mundiales y México no escapa a la tendencia”.
“El precio ha caído 21% en pesos, con los precios más bajos desde 2017, así es que surge el descontento y se atendió por instrucciones de la presidenta”, señaló.
Entre los acuerdos alcanzados, se estableció que los gobiernos federal y estatales sumarán recursos para otorgar un apoyo de 950 pesos por tonelada de maíz a productores del Bajío, beneficio que alcanzará a cerca de 90 mil agricultores.
Además, se ampliará el programa “Cosechando Soberanía”, que ofrecerá créditos con una tasa de interés anual del 8.5% y un seguro agropecuario para proteger la producción.
Finalmente, se creará el Sistema Mexicano de Ordenamiento de Mercado y Comercialización del Maíz, que buscará establecer reglas claras y participación de todos los actores de la cadena productiva, con el fin de garantizar mayor estabilidad y transparencia en el mercado del grano.