
El dirigente de la Unión Campesina de Emigrantes Mexicanos, Aarón Cabañas Marcial, lanzó un fuerte reclamo al gobierno estatal por el abandono histórico hacia la comunidad migrante y los exbraceros guanajuatenses, quienes siguen esperando justicia y reconocimiento.
Cabañas gestiona una reunión con la gobernadora Libia Dennise García Muñoz Ledo para exigir acciones concretas y no discursos vacíos. Señala que el estado ha dado la espalda a miles de guanajuatenses que dejaron su vida trabajando en Estados Unidos y que hoy, junto con sus viudas y representantes, no reciben ni un solo peso de apoyo, a pesar de que en otras entidades sí se les ha reconocido y respaldado.
Criticó que durante la pasada administración estatal se ignoraran las peticiones de los migrantes bajo el pretexto de priorizar la inversión en la industria automotriz.
Mientras tanto, las necesidades de los guanajuatenses en el exterior y sus familias han sido sistemáticamente marginadas.
El líder también exigió que el gobierno estatal interceda ante la Federación para abrir en Guanajuato módulos que permitan a los migrantes tramitar la legalización de cargos y documentos estadounidenses.
Aarón Cabañas aseguró que esta gestión ya fue planteada, pero fue ignorada deliberadamente.
Denunció que, aunque Guanajuato presume ser un estado migrante, no ha habido voluntad política para atender sus demandas.
La exigencia de Cabañas Marcias es clara: que el nuevo gobierno deje de lado el olvido y la indiferencia, y atienda de una vez por todas a quienes sostienen con remesas una parte fundamental de la economía estatal.