
La empresa EPSA, clausurada por la Coordinación de Protección Civil y Bomberos de Irapuato luego de que uno de sus trabajadores murió al explotarle una alcantarilla ubicada al exterior, al verter un químico, abrió sus puertas este viernes, pero para comenzar con una mudanza.
Varios tráileres ingresaron a la fábrica de plásticos ubicada en la calle 5 de febrero en la colonia conocida como “La Perdida”, para comenzar a sacar las cosas que había al interior.
Es importante mencionar que el 2 de julio de este año, fue cuando se registró la explosión de la alcantarilla, que derivó en la muerte del trabajador de EPSA, conocido como “El Puma”.
Al día siguiente, Protección Civil clausuró con sellos la empresa dedicada a la fabricación de plásticos y polímeros.
Asimismo, un laboratorio privado y el de la JAPAMI tomaron muestras del agua acumulada en la alcantarilla que detonó para deducir qué pudo haber provocado el suceso.
Sin embargo, a 17 días del hecho, no hay resultados de estos muestreos por parte de los laboratorios o al menos no se han dado a conocer.
Sin embargo, la tarde de este viernes, comenzó la extracción de todos los objetos y materiales que hay al interior de la empresa ubicada cerca de la zona centro.
Diana Magadaleno, familiar del fallecido, afirmó que hay molestia porque la empresa no tenía asegurado a su tío, razón por la que exigió justicia y que haya castigo para los responsables.
Asimismo, dijo que el dueño de esta fábrica se quiso desligar de que “El Puma” trabajaba ahí y lo reconoció como un indigente, pese a que tenía muchos años laborando.
Los familiares del occiso afirmaron que, si la gente los apoya, seguirán luchando para que haya justicia, ya que lo que se perdió fue una vida.