
La Diócesis de Irapuato expresó su dolor y consternación por los hechos violentos ocurridos la noche del martes en la colonia Barrio Nuevo, donde un ataque armado cobró la vida de al menos 12 personas y dejó a varias más heridas durante la celebración de una fiesta patronal.
Mediante un comunicado oficial, la Iglesia manifestó su solidaridad con las familias afectadas y ofreció su oración y cercanía en estos momentos de sufrimiento.
Lamentó profundamente que este tipo de hechos sigan ocurriendo en medio de comunidades que buscan la convivencia y la fe.
La Diócesis condenó el atentado y llamó a quienes provocan la violencia a abandonar el camino del terror y buscar la reconciliación.
También hizo un firme llamado a las autoridades para que actúen con responsabilidad, esclarezcan lo sucedido y garanticen que los responsables enfrenten la justicia.
Finalmente, la Iglesia pidió que la comunidad no pierda la esperanza y se mantenga firme en la construcción de la paz, empezando desde las familias y los entornos más cercanos.