
Una misión se puso en marcha el miércoles para rescatar a la tripulación del carguero Eternity C, que se hundió en el mar Rojo tras un ataque en el que murieron al menos cuatro miembros de la tripulación.
Las empresas de seguridad que participan en la operación comunicaron que cuatro miembros de la tripulación y un guardia armado del buque han sido sacados del agua, donde llevaban más de 24 horas.
Afirmaron que aún no habían logrado establecer contacto visual con el resto de los 22 miembros de la tripulación ni con otros dos guardias que se encontraban a bordo.
«Seguiremos buscando al resto de la tripulación hasta la última luz del día», dijo un responsable de la empresa griega de gestión de riesgos marítimos Diaplous.
«Aspiramos a una operación pacífica», había dicho antes el responsable.
El Eternity C fue atacado por primera vez el lunes por la tarde con drones marinos y granadas propulsadas por cohetes disparadas desde lanchas rápidas por milicianos hutíes con base en Yemen, dijeron fuentes de seguridad marítima.
Dos fuentes de seguridad dijeron a Reuters el miércoles que el buque fue atacado de nuevo el martes por la noche, obligando a la tripulación a saltar al agua.
El grupo alineado con Irán no ha reivindicado la autoría del ataque.
Una fuente dijo que se temía que parte de la tripulación hubiera sido secuestrada por los hutíes.
La tripulación está compuesta por 21 filipinos y un ruso. Entre los cuatro guardias armados hay un ciudadano griego.
Cosmoship Management, operador del buque con bandera de Liberia y operado por Grecia, no ha respondido a las peticiones de confirmación de víctimas o heridos.
Cargos del Gobierno griego han mantenido conversaciones diplomáticas sobre el incidente con Arabia Saudí, un agente clave en la región, según fuentes.
Fuente: Milenio || Imagen: Milenio