Salamanca, Gto.- La celebración de Día de Muertos en Salamanca está encontrando una nueva expresión a través de la fusión, de la tradición artesanal y la tecnología de corte láser. Emprendedores locales han adoptado el uso de madera MDF (Fibra de Mediana Densidad) para crear altares y ofrendas minuciosamente detalladas, desplazando a las tradicionales estructuras hechas con huacales.
Una de estas iniciativas, con más de 12 años en el mercado, se dedica a diseñar y producir altares modulares que, además de ser estéticos, abordan el tema del reciclaje al utilizar un material derivado de residuos de madera.
El señor Rogelio, quien compartió su experiencia, explicó que el MDF es un residuo de la madera, lo que añade un valor de sostenibilidad a su trabajo. «El MDF es un residuo del de la madera, o sea, MDF significa fibra de mediana densidad. Y de ahí hablamos también de un reciclado», comentó el artesano.
El inicio del proyecto, que utiliza una máquina de corte láser, no fue sencillo. El emprendedor relató que, al principio, tuvieron que buscar mercado fuera de Salamanca: «No éramos profetas en nuestra propia tierra. Tuvimos que buscar mercado en Celaya, Dolores, Irapuato y los municipios circunvecinos».
Sin embargo, tras 12 años, la aceptación local ha crecido exponencialmente. «Bendito sea Dios, aquí ya no me doy abasto. La gente misma nos ha comentado que ya no ponen sus huacales, ya vienen y sí nos compran,» afirmó. Incluso, este año han visto sus ventas «rebasadas», reflejando un cambio en la preferencia del consumidor.
PRECIOS ACCESIBLES Y PIEZAS ÚNICAS
Los altares se ofrecen en una amplia variedad de tamaños, desde el más pequeño de aproximadamente 25 por 18cm hasta estructuras de 1 metro de alto por 1.22 metro de ancho.
Los precios son variados para adaptarse a todos los presupuestos, comenzando desde 100 pesos para las piezas más sencillas y alcanzando hasta los 1,800 pesos para los altares más grandes y elaborados, que incluso pueden incluir ofrendas decorativas de calaveras o pan de muerto hechas en la misma técnica.
El artesano aseguró que todos los modelos se venden bien, desde los más económicos hasta los de 1,800 pesos, destacando que la venta de altares «sin ofrendas» y «con ofrendas» se ha mantenido por igual.
UNA TRADICIÓN FAMILIAR Y EDUCATIVA
El trabajo no solo es un negocio, sino una actividad familiar que resalta el valor de la artesanía a pesar de usar tecnología avanzada. Además, se ha convertido en una herramienta didáctica: «Participan [los niños] porque nos han dicho los mismos clientes… Estaba una niña bien contenta porque ‘mira, mamá, vamos a hacer’ y hasta para los animalitos mencionaban el nombre y decían que le iban a recordar», concluyó el comerciante, destacando el significado emocional de estas piezas en la preservación de la memoria.