
La Diócesis de Irapuato, celebró sus 20 años de existencia, evento en el que el obispo, Enrique Díaz Díaz, reconoció los avances, los pendientes y las cosas que se realizarán para el fortalecimiento de la Iglesia Católica.
Desde el Inforum, donde se realizó el evento conmemorativo al que acudieron más de mil personas, así como los obispos de la Provincia del Bajío, Díaz Díaz hizo el compromiso de defender a las familias, las que aseguró “han sido tan golpeadas y tan zarandeadas”.
“Sentimos muy fuerte los golpes contra la familia, por eso nos comprometemos, queremos trabajar y luchar para tener familias entusiastas, familias que tengan el evangelio”, afirmó.
El representante de la Iglesia Católica en Irapuato, declaró que se tienen que romper las desigualdades y dándole el valor a todos los laicos, al ser constructores de paz.
De acuerdo a Enrique Díaz, es necesario generar una gran misión diocesana para no ser sujetos pasivos que solamente ven los problemas que pasan.
“No esperemos que nos hagan reclamos, la primera tarea será evangelizarnos y evangelizar, que no quede ninguna persona sin haberse encontrado con Jesús, no lo encerremos, abramos las puertas, vayamos a evangelizar”, expresó.
Enrique Díaz pidió acabar con las divisiones y descalificaciones, así como el muro del odio y del pecado, velando por los derechos de los demás y practicando la justicia, pues afirmó que hay personas que padecen el hambre, la discriminación y la inseguridad.