Salamanca, Gto.- La Presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, anunció de manera oficial que la construcción de la nueva Central de Ciclo Combinado Salamanca II iniciará en marzo de 2026. Este proyecto forma parte de una cartera de obras prioritarias de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) que buscan fortalecer la soberanía energética del país y atender el crecimiento de la demanda en el Bajío.
Durante la conferencia matutina en Palacio Nacional, se detalló que actualmente se realizan los trabajos de ingenierías básicas para este complejo en Salamanca, el cual se suma a otros cuatro proyectos de alta eficiencia licitados en puntos estratégicos como Tula, Altamira, Mazatlán y Los Cabos.
La inversión total para este paquete de cinco proyectos de generación asciende a 4 mil 328.3 millones de dólares. En conjunto, estas centrales aportarán 2 mil 913.9 MW al Sistema Eléctrico Nacional (SEN), proporcionando el respaldo necesario para evitar apagones y garantizar la estabilidad del suministro.
La titular de la CFE, Emilia Esther Calleja Alor, explicó que el objetivo central es que el Estado recupere su capacidad de ordenar y regular el sector.
“Estos proyectos se definieron a partir del comportamiento real del sistema y la necesidad de contar con capacidad suficiente y confiable para que el Estado mantenga una participación del 54% en la generación”, puntualizó la funcionaria.
Un punto clave para la celeridad de la obra en Salamanca es que la nueva unidad se construirá dentro de las instalaciones ya existentes de la CFE. Esto permitirá:
• Aprovechar la infraestructura instalada: Se utilizará la red de transmisión interconectada actual.
• Acceso a combustible: La central ya cuenta con acceso directo a gas natural.
• Reducción de costos: El uso de terrenos propios acelera los estudios previos, reduce riesgos técnicos y baja los costos de ejecución.
Además de la eficiencia operativa, la tecnología de Ciclo Combinado es fundamental para los compromisos climáticos de México. Según la directora de la CFE, este modelo permite una disminución significativa en la emisión de gases de efecto invernadero y reduce la dependencia de combustibles fósiles más contaminantes, como el combustóleo.
Con el inicio de la construcción de Salamanca II en 2026, el municipio se reafirma como un pilar energético para el estado de Guanajuato y el centro del país, asegurando energía suficiente para la industria y los hogares durante las próximas décadas.