Ha pasado un año que la integrante de un colectivo de búsqueda, Lorenza Cano, fuera privada de su libertad en la puerta de su casa, cuando hombres armados la sustrajeron de su casa en la colonia Ampliación El Cerrito, ahí asesinaron a su esposo e hijo, quienes trataron de impedir el secuestro.
Lorenza Cano se integró al colectivo de búsqueda, Salamanca Unidos Buscando Desaparecidos, desde el 2018 que su hermano, Francisco Cano, habría desaparecido en el mes de agosto de ese mismo año.
Luego de pertenecer por cinco años y estar en pie de búsqueda por su hermano, Lorenza lamentablemente pasó a formar parte de la lista de desaparecidos cuando la tarde del 15 de enero, hombres armados se la llevaron.
A un año de su desaparición, para sus familiares ha sido un panorama muy difícil, pues hasta para buscar un trabajo, les han cerrado la puerta por hecho de ser familiares.
«Cuando saben que somos allegados, mejor nos dan las gracias. Por eso, ahora que logré encontrar trabajo, prefiero no decir nada, no nos avergüenza, pero necesitamos trabajar.» Comento su familiar.
Ha sido un panorama difícil, pues un año sin saber de su paradero, la fiscalía del estado de Guanajuato, aún no tiene repuestas.
Mientras tanto, sigue una silla vacía en casa, un recuerdo que atesorar y una incertidumbre por saber qué le pasó a Lorenza Cano.
